Shoegazing del bueno

My Bloody Valentine tienen herederos y todos estamos de enhorabuena. Me hubiera gustado dejar esta frase lapidaria y poner el video de la canción en cuestión. Sin dar explicaciones de porqué hago tan arriesgada afirmación. Una lineas más abajo se darán cuenta que con la fuerza que tiene el tema, sobran las palabras, pero vamos a darles unos breves apuntes para que puedan esbozar brevemente el contexto histórico-cultural que nos ocupa.

Los muchachos son neoyorquinos y (agárrense) se llaman The Pains of Being Pure at Heart, toda una declaración de intenciones. Su primer álbum, de mismo nombre, salió el pasado 3 de Febrero, así que como pueden ver el post de hoy huele a nuevo. Y es un autentico pelotazo. Llevo escuchándolo un par de días de forma ininterrumpida y la verdad es que no puedo estar mas contento, porque todavía queda gente con talento por ahí, y eso es para que nos congratulemos todos.

Además, viene bastante bien aislarte con algún buen disco cuando te están paseando por todas las televisiones la farsa infame esa de los premios Grammy, que de verdad, me ponen de muy mal humor (y si ya veo a Coldplay intentando copiar a los Beatles con atuendos similares al Sgt. Peppers, me entran ganas de matar y destruir)

Bueno, les dejo aquí con mis nuevos amigos. Darán que hablar.



El Pato da las gracias desde aquí a gente como Deif que es una fuente inagotable de inspiración para un humilde mensajero como yo. Un abrazo chaval.