martes, 28 de abril de 2009

Esto va por ti, balilla mía…

Estoy teniendo una interesantísimas conversaciones últimamente acerca de porqué no actualizo el blog con la frecuencia habitual. Mi respuesta esta siendo que estoy inmerso en la compra de un nuevo automóvil y que esto me ocupa la mayor parte de mis fuerzas pensantes.
En este punto se suele derivar en una conversación sobre tal o cuál coche, que no hace mas que confundirme más en mi desestructurada intención de adquirir un nuevo vehículo.

Y ahora ponte a elegir uno...

Eso era hasta hoy, que uno de mis increpadores me ha respondido con la siguiente interjección ‘pffff’, a mi más que aceptable excusa para luego continuar con un diálogo (mas bien monólogo puesto que yo sólo he sido capaz de mirarle aturdido) que no puedo más que reproducir íntegramente:

‘Eso dice muy poco de ti como persona…un hombre que se preocupa más por un coche que por el arte..¿un coche que te dura? ¿10 años?...escribir no tiene precio..is priceless’

Ante estas sentencias, no puedo más que aparcar (chiste fácil) la maniobra (otro, vamos que estoy fuerte) de la compra del nuevo vehículo. Además todo el mundo sabe que acabar cualquier frase repitiendo la última parte en inglés, le da un empaque irresistible.

Su perfil bueno

Así que voy a aprovechar la ocasión para darle un homenaje más que merecido a mi actual coche, un RENAULT CLIO gris que rezuma encanto y que ha aguantado como un titán mi despreocupada conducción, sin quejarse en exceso y siempre de buen humor. Podríamos hablar de los problemas eléctricos, de los días que arbitrariamente no arrancaba, o de aquella vez que me dejo tirado en medio de Avenida de America donde creé un atasco de más de 5 kms, pero es momento de dejar la reprimenda de lado y darle las gracias, por haber sido mi compañero de viaje durante 6 años.

Un día que nos pusimos a jugar los dos con la nieve

No se me ocurre mejor homenaje que dedicarle dos canciones de temática automovilística, como son: la increíble 'Karma Police' de los no menos increíbles Radiohead (con total seguridad es una de las canciones que más veces se ha escuchado en el interior de mi coche) y como no podía ser de otra manera el 'Crash' de The Primitives, que hace unos años se encargaron de versionar y siniestrar (¡festival del humor!) los patosos de El Canto del Loco.

Disfrútenlas y mientras piensen en ese balilla plateado que quemaba el asfalto de toda España, repartiendo alegría y saber estar. ¡Diez hurras por él!





El pato les promete que este post es altamente emotivo. Voy a echar de menos ese coche, ha visto muchas cosas de mi vida el muy granuja. Siempre tendrá un hueco en mi corazoncito.

3 comentarios:

Randy dijo...

Una entrada muy conmovedora y profunda... very profound

BRARBRARA dijo...

karma police? no me suena... jajajaja yo me quedo con lo de "¿de la mañana?" y el estupendo día de quedarnos tirados en alcobendas... q fantástico fue (moló más lo primero jajaja)

Entxufao dijo...

ir por la m-40, ver un "the pelot" en el arcen y cruzarse tres carriles para hacer compañia a un amigo en un pinchazo... solo podia ser Rivero con su pelotilla!